Bogotá, Colombia — La séptima semana de audiencias en el juicio contra el expresidente Álvaro Uribe se vio marcada por un error inesperado de la fiscal delegada Marlene Orjuela. Lo que inició como una jornada de declaraciones de testigos, rápidamente se convirtió en un episodio de controversia cuando la funcionaria, sin percatarse de que tenía el micrófono encendido, hizo un comentario burlón sobre un mensaje publicado por Uribe en sus redes sociales.
El mensaje que desató la controversia
Horas antes, Uribe había escrito en su cuenta de X (Twitter): “Al reiniciar estas audiencias pido la ayuda del santo padre Francisco, para que desde el cielo me ayude a superar este injusto juicio”.
Lo que el expresidente no esperaba era que su mensaje fuera leído en voz alta por la fiscal Orjuela, su asistente y el senador Iván Cepeda durante un receso. Entre risas, la fiscal pronunció una frase que ahora la tiene en el ojo del huracán: “Yo también le estoy pidiendo al papa que me ayude, ¿a quién le hará caso?”.
Lo que no sabía era que el micrófono estaba abierto, permitiendo que todos los presentes—incluido Uribe—escucharan el comentario en tiempo real.
Reacciones inmediatas
El incidente provocó una reacción instantánea por parte de Uribe, quien cuestionó la imparcialidad de la Fiscalía a través de un mensaje en X:
“¿Será que lo que se oyó a la fiscal, en recocha y camaradería con las supuestas víctimas, da para una sanción disciplinaria? El error de dejar abierto el micrófono los delató. Por lo menos esos comportamientos afectan la reclamada majestad de la justicia”, escribió el exmandatario.
Testigos y silencios en la audiencia
En el mismo día, el abogado Samuel Arturo Sánchez Cañón fue presentado como testigo de la Fiscalía, pero optó por guardar silencio al enfrentar su propio proceso penal en el Juzgado 46 Penal del Circuito Especializado de Bogotá.
El fiscal Daniel Hernández, encargado del caso, ya formuló acusaciones contra Sánchez y el exabogado de Uribe, Diego Cadena, con una audiencia preparatoria programada para el 28 y 29 de abril.
¿Un nuevo giro en el juicio?
El incidente del micrófono abierto plantea interrogantes sobre la imparcialidad del proceso y deja a la fiscal delegada en el centro de la polémica. Ahora, la pregunta es: ¿habrá consecuencias disciplinarias para la funcionaria?
Mientras el juicio avanza, la defensa de Uribe insiste en que estos episodios afectan la credibilidad de la justicia y podrían influir en el desarrollo del caso.